Cómo aumentar la confianza del consumidor en el sector retail a través de la tecnología

Dada la amplia variedad de oferta que existe actualmente en el mercado, el consumidor se ha vuelto más exigente y selectivo con aquello que compra. El sector retail está repleto de opciones y para las marcas resulta esencial encontrar un elemento diferenciador que las ayude a posicionarse.
En este sentido, la tecnología puede ser una gran aliada. Gracias a ella es posible llamar la atención del usuario y aumentar la confianza que este tiene en productos y marcas.

En Neurafy somos especialistas en diseñar diferentes soluciones con base tecnológica para lograr este tipo de retos. Pero hoy queremos centrarnos en una de ellas: las etiquetas electrónicas.
Estos dispositivos ofrecen un sinfín de posibilidades para destacar en el mercado. Tan solo necesitamos conocer, entre otros datos, qué espera el consumidor de las marcas. 

Desafíos actuales para el sector retail

Como decíamos al inicio, hoy en día existe una alta competencia en el sector retail. No importa a qué tipo de negocio hagamos referencia: supermercados, tiendas de moda, ferreterías, librerías… Lo habitual es encontrarnos con varias marcas que dan respuesta a una misma necesidad.

Es por ello que es imprescindible implementar acciones que las ayuden a destacar y posicionarse en la mente del consumidor como marcas confiables y de calidad.
Igualmente, en el caso de marcas comprometidas con ciertos valores, resulta esencial realizar acciones que las asocien con ellos.

Ligado a esto, podrían ser muchos los desafíos a los que se enfrenta el sector retail. Aquí tienes los principales:

• Fidelización de clientes. El primer punto que preocupa a las empresas del sector retail es la falta de fidelización de clientes. Como bien sabemos, traer un cliente nuevo al negocio es algo muy costoso, por ello, una vez que han conseguido llamar su atención, lo ideal es fidelizarlo. Así, podrá convertirse en un consumidor recurrente y aumentar su ticket medio de compra.

• Generación de confianza. Este elemento es clave para que un consumidor decida probar los productos o servicios de una marca. Y más aún para fidelizarlo. Por lo tanto, existe un gran reto en términos de confianza. Las personas solo sacan su tarjeta de crédito cuando tienen la certeza de que van a recibir un producto realmente bueno.

• Transparencia. El consumidor rechaza todas aquellas marcas que ocultan información o no son del todo transparentes con sus decisiones y actuaciones. Y más aún si ha salido a la luz pública alguna mala praxis que hayan realizado en el pasado. Es muy complicado resolver este tipo de situaciones. Por lo tanto, la transparencia es fundamental en el sector.

• Consumidores concienciados y comprometidos. A todo esto hay que sumar que cada vez hay más consumidores concienciados con problemáticas como la explotación laboral o la sostenibilidad. Por lo tanto, demostrar el compromiso de la empresa con este tipo de movimientos es un reto que deben afrontar aquellas que deseen sobresalir.

¿Qué papel juega la tecnología en el sector?

En términos generales la tecnología puede ofrecer un amplio abanico de soluciones, tanto complejas como simples, para que una marca se posicione en el mercado. 

En este sentido, es posible ofrecer distintas alternativas en función de las necesidades a cubrir y las particularidades de la empresa.

Las etiquetas electrónicas podrían ser una de ellas. Estos dispositivos ofrecen grandes ventajas de carácter interno para las compañías, pero si hablamos de posicionamiento, ayudan a resolver la mayoría de retos que mencionamos antes. En los próximos párrafos lo explicaremos.

Las etiquetas electrónicas ¿qué información pueden ofrecer?

Las etiquetas electrónicas son una solución tecnológica que se adapta a las necesidades de cada marca en particular. No importa si hablamos de un supermercado o de una tienda de ropa, en ambos casos existe la posibilidad de incorporarlas.

Son excepcionalmente útiles para generar confianza en el usuario. Pues, hoy más que nunca, estamos ante un cliente que quiere saberlo todo sobre lo que está comprando. Y gracias a estos dispositivos podemos cumplir con sus expectativas.

Por ejemplo, estas etiquetas pueden incluir información como:

• Precio. Este es uno de los aspectos más básicos de una etiqueta. Pero, no por ello, podemos obviarlo en este listado. Es información que debe presentarse de forma clara para no dar lugar a ambigüedades o errores que puedan afectar a la imagen de marca de la organización.

• Características. En las etiquetas tradicionales ya aparecen las características del producto que vamos a comprar. Sea una caja de galletas o un jersey de lana. En cualquier caso nos referimos a características físicas como, por ejemplo, peso de la caja o talla y dimensiones de la prenda. Lo que sí es cierto es que a través de la etiqueta electrónica se podrá ampliar dicha información.

• Alérgenos. En el caso de los alimentos, es esencial ofrecer detalles sobre cualquier tipo de alérgeno que contengan. Igualmente, se podría incluir información referida a grupos de población con problemas concretos. Por ejemplo, los celíacos o intolerantes a la lactosa. Poner especial atención en ellos, ayudará a las marcas a ganarse su confianza de manera más rápida.

• Ingredientes. Igualmente importante es incluir una sección en la que aparezca de manera clara y detallada cada uno de los ingredientes de un determinado producto o alimento.

• Composición. En el caso de las prendas de ropa o productos del hogar, ferretería, mobiliario y similar, conviene ser transparente con el cliente y explicarle de qué materiales está elaborado su producto. De este modo, podrán tomar decisiones en base a sus convicciones. Por ejemplo, si una prenda está hecha con piel de animal, habrá personas que la rechacen completamente. Y es preciso ser honestos y especificar su composición.

• Huella de carbono. Otro aspecto fundamental es informar al consumidor sobre el total de emisiones de gases de efecto invernadero que ha supuesto que un producto se fabrique y llegue hasta él. Así, aquellas empresas comprometidas con el medio ambiente, podrán demostrarlo y el consumidor podrá ser fiel a sus valores.

• Análisis del ciclo de vida. Igualmente, cabe evidenciar la importancia de ofrecer información sobre el impacto ambiental que ha tenido un producto a lo largo de toda su vida. Desde su origen hasta el final de su vida útil. Con esto se pretende potenciar la imagen de aquellas empresas que estén trabajando para minimizar los riesgos ambientales derivados de su actividad. El consumidor podrá saber si el producto que adquiere ha perjudicado más o menos al planeta. Y, en base a ello, tomar una decisión.

• Lugar de fabricación. Otro dato que suele interesar a los clientes es la procedencia de aquello que van a comprar. Hay quienes son fieles a los productos fabricados a nivel nacional, otros no le dan importancia.

• Sugerencias de uso. Por último y como valor añadido, otro tipo de información que se puede incluir en las etiquetas electrónicas son sugerencias de uso. En el caso de los productos alimenticios puede tratarse de recetas, en el de la ropa de combinaciones y posibles outfits, en los productos del hogar podemos dar trucos de limpieza…

Sea como sea, las etiquetas electrónicas son una excelente herramienta para aportar al cliente toda la información que busca antes de comprar un producto. En ella veremos los datos más básicos, para acceder al resto o ampliar detalles, se podrá usar un código QR. 

Su uso tiene grandes beneficios, pero es evidente que la generación de confianza es uno de los más notables. Si quieres implementar este tipo de soluciones en tu negocio, ponte en contacto con nosotros. Juntos diseñaremos la etiqueta electrónica que necesitas para responder a las necesidades de tu cliente.