Cómo funciona el proceso de desarrollo de prototipos de productos

Poco se habla de la importancia que tiene esta primera parada (la del prototipo) en el proceso de desarrollo de productos. 

Porque si de algo pecamos los humanos es de enamorarnos de una idea y creernos que es maravillosa y que no tiene fuga, sin haberla bajado a tierra todavía. 

Pero en todos esos casos en los que esa idea consta de un montaje, ya sea virtual o físico, es indispensable dedicar una primera etapa a la elaboración de un prototipo.

¿Por qué?

Porque sin este no se puede comprobar realmente su viabilidad y funcionamiento adecuado, y porque te va a ahorrar MUCHOS dolores de cabeza, créenos.

Por eso en este artículo te vamos a contar cómo es el proceso de desarrollo de prototipos de producto para que puedas actuar desde el principio con unas bases sólidas.

Aquí daremos respuesta a estas preguntas: 

• “¿Cómo hacer realidad mi idea?”
• “¿Cómo materializarla?”
• “¿Necesito un prototipo aunque mi idea sea virtual?”
• “¿Cómo desarrolló el prototipo de un producto?”

Preguntas que posiblemente te habrás hecho si has aterrizado aquí, así que, vamos al lío:

¿Qué es un prototipo?

Un prototipo es una versión inicial, una representación parcial de un producto, sistema o concepto que se tiene pensado desarrollar.

O sea, que es una muestra tangible (o demostración visual) que se crea con el propósito de evaluar y probar las características, el diseño, la funcionalidad y la viabilidad de una idea antes de meter las manos en harina y producirla a gran escala.

Hay diferentes tipos de prototipos y el uso de uno u otro dependerá del tipo de proyecto. Estos pueden ser:

• Maquetas físicas.
• Representaciones gráficas.
• Simulaciones interactivas.
• O, incluso, prototipos virtuales en forma de software.

¿Cuál es su objetivo principal?

Pues permitirle a los diseñadores, ingenieros, desarrolladores, etc., tener una visión de lo que será el producto final, dándoles opción de realizar las mejoras que sean necesarias.

Entonces, se puede decir que su función es proporcionar una representación de una idea para ayudar a identificar problemas, evaluar la viabilidad técnica, explorar diferentes soluciones y comunicar de manera clara y directa el concepto del proyecto a otras personas involucradas en el proceso de desarrollo del producto, evitando así el temido efecto ‘teléfono escacharrado’.

¿Y dónde se pueden utilizar?

En nichos tan interesantes como el diseño industrial, la ingeniería, la arquitectura, el desarrollo de software y la creación de productos electrónicos, entre otros. 

¿Cuáles son los pasos previos al desarrollo del prototipo de tu producto?

Como te comentábamos arriba, el desarrollo de un prototipo es una de las etapas más importantes en el camino de petarlo a lo bestia con tu proyecto innovador.

Ya te hemos contado cuáles son algunos de sus beneficios y ahora vamos a contarte, punto por punto, cómo crear una buena base de información, a todo color y con todo detalle, para que a la hora de empezar no haya sorpresas o imprevistos.

Ponte en modo rata de biblioteca para recopilar toda la información necesaria

Este primer paso consiste en hacerte con todos los detalles de tu idea para que así, su representación a través del prototipo, sea lo más parecida posible a lo que tienes en tu cabeza.

Es un ejercicio de sintetización, pero también de sintaxis, porque cuanto más claro comuniques lo que quieres, más fácil le resultará al equipo al que le toca llevarlo a la realidad entenderlo.

¿Y cuál es la manera más común de hacerlo?

A través de un boceto.

Vale, sí. Trasladar las ideas que tienes en la cabeza al papel puede resultar más complejo de lo que a priori parece, sobre todo si no se te da bien dibujar o maquetar en 3D, pero si eres un negado siempre puedes tirar de ayuda externa o de tu propia creatividad, que para eso la tienes.

Tómatelo en serio, porque aquí toca definir bien las partes de tu idea y describir todas las partes que la conforman.

Este es un paso primordial para entender cómo se va a construir el prototipo.

Toca espiar: la vieja del visillo no será nadie a tu lado

Tendrás que mirar a tu alrededor e investigar las tendencias del mercado para contextualizar tu idea en el sector al que te diriges.

Es decir, que es momento de analizar si aquello que tienes en la cabeza y con lo que quieres innovar en tu empresa es realmente competitivo frente a otros productos.

Para ello, investiga las tendencias del mercado y las necesidades de los usuarios, esa información te será MUY relevante a la hora de completar las características que tendrá finalmente tu idea.

Y recuerda esto: 

Si estás apostando por innovar, ve a por la primera posición en el mercado. Que tu intención sea ponerte a la altura de los mejores productos y lograr que tu propuesta sea la mejor de todas.

Esa es la actitud para atraer el interés de potenciales clientes en cuanto tengas tu prototipo desarrollado.

Haz tu pedido: ¿real o virtual?

Ahora que ya tienes más que claras las características de tu idea para desarrollar un prototipo, analiza de qué manera quieres representarla. 

Hazte esta pregunta:

¿Cuál es el método de presentación que se adapta a las necesidades de tu producto?

Nosotros te aconsejamos: 

1. Que si tu idea es para un producto de tamaño pequeño, mejor desarrolles un prototipo funcional con el que puedas mostrarlo de forma real y que incluso lo puedas llevar contigo a ferias, reuniones con clientes o posibles inversores, etc. y dejarlos con la barbilla rozando el suelo.
2. O, por el contrario, que si la fabricación de tu prototipo es muy compleja, o los costes de fabricación son muy altos, te decantes por una infografía 3D que te ahorrará costes, pero que hará que puedas presentar tu idea de forma atractiva y realista.

Decide la presentación que más se ajusta a tus circunstancias y no dudes de que, en ambos casos, tendrás una herramienta eficaz para presentar tu idea ante tu equipo y ante el mundo.

Si tienes muchas dudas sobre cómo desarrollar tu prototipo, nosotros podemos ayudarte a tomar la decisión aquí mismo.

Y ahora sí, vamos al turrón.

Así se realiza el prototipo de un producto

El antes es tan importante como el durante en la creación de un prototipo. 

Es como si estuvieras diseñando tu casa y estuvieras eligiendo la ubicación, dibujando los planos y eligiendo los materiales de los que estará hecha.

Gracias a todos esos detalles bien pensados serás capaz de crear una maqueta fiel a la realidad en la que esperas que se convierta tu idea. 

Y estos son los pasos para conseguirlo:

Estudio en mano para terminar temprano

El primer paso para empezar a desarrollar el prototipo de tu producto es comprobar los aspectos técnicos de tu idea, los sistemas, la electrónica y las partes que tenías planteadas.

La unión de todo esto es lo que hará posible que funcione como debería, y por eso es tan importante comprobar que cada parte es la adecuada y que el conjunto funciona como se espera.

Mente abierta: deja espacio a la flexibilidad

Como te decíamos al principio de este artículo, los humanos tendemos a aferrarnos a una idea y pensar que es maravillosa tal y como la pensamos, pero la realidad es que, cuando la hacemos tangible, hay muchas variables a tener en cuenta que pueden hacer que se modifique.

Por eso, no te aferres a tu primera idea. Es posible que aquello que tenías en la cabeza no funcione al 100% como esperabas.

En el proceso de desarrollo de tu prototipo es fundamental tener paciencia y estar atento a estudiar y realizar los ajustes que el diseño requiere.

Trabajo en equipo: la unión hace la fuerza

Porque sí, el trabajo en equipo es esencial en el desarrollo de tu proyecto, así que mantener una comunicación abierta y directa entre equipos durante todo el proceso hará que todo fluya mucho mejor.

Si han surgido cambios en tu diseño, lleva un control de cómo va avanzando el proceso, pero deja libertad a los desarrolladores para que tomen decisiones sobre cómo evolucionar adecuadamente.

Déjate aconsejar y sé creativo en las soluciones, sin miedo al juicio.

Tu prototipo está listo, ¿y ahora qué?

¡Enhorabuena! Tras unas cuantas semanas de implicación y espera, por fin tienes un prototipo que representa a la perfección esa idea que tenías en mente. 

Ahora sí que sí, tu prototipo te abrirá las puertas a nuevas negociaciones y a mayores avances gracias a que el público puede ver la utilidad, calidad y aporte de tu idea.

Este prototipo funcional te va a permitir testear el producto, entender el interés real de los usuarios y exponer las posibilidades que tiene esta idea innovadora en el mercado. 

¿Quieres empezar ya mismo? Empezamos cuando quieras.

¡Que todo el mundo lo vea!

No vale solo con crearlo, sino que tendrás que difundirlo. La clave está en la comunicación.

Ahora que cuentas con un prototipo de tu producto, es el momento de compartir esa idea con el mundo.

Si elegiste hacer un prototipo físico, hazle unas buenas fotos y un vídeo que muestre su funcionamiento. Y si elegiste la opción virtual, genera un vídeo explicativo con gancho para mostrar sus beneficios. 

Eso sí, ten en cuenta que la primera impresión es la que cuenta, por eso la imagen debe estar cuidada al detalle y ser profesional para presentarlo ante empresas e inversores.

Ten en cuenta que, a diferencia de las ideas puestas en papel, los productos que se han desarrollado y cuentan con un prototipo tienen más posibilidades de recibir financiación y de ser comercializados antes.

Conclusión

Qué, ¿cómo se te ha quedado el body? 

Esperamos que con este paso a paso te hayamos ayudado a aclararte con el proceso de llevar a cabo un prototipo de producto.

La intención es mostrarte que el paso a paso es más sencillo de lo que parece, pero que cada una de las partes es vital para que tu idea tenga el éxito que merece.

Ojalá estos breves pasos te ayuden con tu estrategia de producto y su desarrollo.

Y si ya lo tienes claro y solo necesitas un equipo con el que ponerte codo con codo a hacer tu idea realidad, haz clic aquí y ponte en contacto con nosotros.

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Si tienes sugerencias, dudas o alguna aportación interesante a este tema, te leemos en comentarios.

¡Hasta pronto!